Satélites, sistemas de información, riesgos geológicos y alertas tempranas


German Viramonte y Emilce Bustos, investigadores del IBIGEO en la Caldera del Cerro Blanco

Científicos del IBIGEO participan en una investigación en el Cerro Blanco,
un volcán con estructura de caldera de la Puna Catamarqueña. El objetivo es
mensurar y describir procesos de deformación del sistema volcánico, aplicando
imágenes satelitales y técnicas de interferometría radar con el fin de generar
mapas que muestran las deformaciones del terreno. La metodología aplicada en
Cerro Blanco es un estudio de base que servirá para evaluar procesos similares
que ocurren en otros volcanes activos de los Andes y del mundo y de otros riesgos
geológicos, como deslizamientos de laderas, movimientos del terreno, etc
José Germán Viramonte, especializado en volcanología, destaca que el
cerro Blanco tiene un cráter de 5.000 metros de diámetro el que fue originado por
una gran erupción hace 4.200 años y que actualmente se encuentra activo. Las
mediciones realizadas desde 2004 con instrumental geodésico de alta precisión,
monitorean la magnitud y la velocidad de la deformación y el hundimiento de la
caldera volcánica, estimada en 1 centímetro por año.
Actualmente, los estudios con los satélites argentinos SAOCOM y sus
sensores de Observación de la Tierra para realizar la gestión de emergencias
ambientales (CONAE), permiten obtener información geoespacial para predecir
cambios repentinos o graduales que implicarían un aumento en la actividad del
volcán. El análisis combinado de datos geológicos de campo, mediciones
geodésicas y geofísicas in situ, sumadas a la información satelital derivada de
análisis de imágenes satelitales radar, permitirán un detallado y ajustado
modelado de los procesos intervinientes facilitando en el futuro evaluar y mejorar
la planificación y evaluación de los riesgos geológicos a nivel global, dice Emilce
Bustos, que junto a José German Viramonte, forman parte del equipo
multidisciplinario que estudia el Cerro Blanco.

Proyecto: Evaluación del origen y monitoreo de la deformación asociada a la caldera del
Cerro Blanco (4200 BP), Puna Austral, utilizando técnicas de InSAR, GPS diferencial y
Geofísicas. En el marco del Anuncio de Oportunidad para el Desarrollode Modelos
Digitales de Elevación y su uso en Aplicaciones SAR, Comisión Nacional de Actividades
Espaciales (CONAE) e Instituto Geográfico Nacional (IGN)